2da Fecha Personal Fest: primer arribo de Kaiser Chiefs a la Argentina
Cosas a destacar? muchas
Desde llegar a la casa de Gala, y finalmente poder conocer a Meli ahí sin dudas empezaba uno de los mejores días que tuve en mucho tiempo.
Después de ahí, empezabamos nuestro camino, las tres juntas en el colectivo con el vendedor de indelebles, hasta llegar a Plaza de Mayo con sus "exóticos" personajes(ehem ehem)
Nuestro destino no era ese, sino el hotel NH, en el cual el motivo de nuestra juntada y posterior movilización al Club Ciudad se estaba hospedando. Junto a un montón de otras chicas fans de la banda y un grupo enorme de brasileros esperamos nerviosamente por la aparición de alguno de ellos.
Y ese momento llegó cuando Simon y Ricky Wilson doblaron la esquina del hotel junto a otro individuo. Si, ahí estaban ellos dos como si nada aproximándose a nosotras.
Conocer a Wilson, dios mio, temblar de tan solo verlo, tener su firma, su foto, escucharlo hablar lo más bien, con toda la paciencia del mundo. Creo que no podía esperar más. Por más que no conocí al resto de la banda (Simon en dos segundos desapareció del lugar), a él era al que más que a algún otro quería conocer, y felizmente así fue. CONOCÍ A RICKY WILSON! estaba y estoy MUY feliz por eso, se los puedo asegurar.
Después de ahí, la ida al Club Ciudad de Buenos Aires, Personal Fest, este año, elegante sport. Pequeño percance al confundirnos el Club Ciudad con Obras, en donde se presentaban diversas bandas de Rock Nacional, de un público que ya de solo mirarlo, y que nos miren a nosotros, era más que evidente que estábamos en el lugar equivocado.
Al fin en el Club Ciudad, nos deleitamos de ver cosas bizarras tales como PUESTOS DE COMIDA CHINA Y TAROT, pero especialmente la precentación de los yankis The Mars Volta, que si bien no me agradaron en lo absoluto, y se convirtieron en la hora más larga de mi diesciochoañera vida, pero sin dudas me reí observando al tipo extraño que estaba al mando de la banda, convulsionando y arrancando pedazos de escenografía como un animal, sin dudas fue una actuación bizarra de lo más entretenida. Y musicalmente hablando debo reconocer que el guitarrista y baterista estubieron muy bien, lástima que la banda me genera un rechazo casi innato, desde la primera vez que los escuché.
A partir de su retirada, la cosa se volvió más interesante...gracias al recambio de gente, que partía a ver a Bloc Party al otro escenario, logramos adelantarnos, y cuanto!, segunda fila después de la valla, bastante bastante bien teniendo en cuenta que estabamos casi al fondo.
Bloc Party pasó en un abrir y cerrar de ojos, por más que intente recordar siquiera un tema no puedo hacerlo. Estaba demaciado concentrada en ver como se iba preparando poco a poco el escenario Motorockr.
Finalmente era el turno de los ingleses que tanto estaba esperando, días, semanas, y estaba ahí, a minutos de que hagan su aparición.
Se apagan las luces, empiezan los gritos, los aplausos y la intro que daba lugar a los cinco, Simon, Nick, Whitey, Peanut y Ricky.
Everything Is Average Nowadays, primer tema, bien Gala, tenías razón, abrieron con ese, y siguieron con el que yo pronostiqué sería el tema apertura, Every Day I Love You Less and Less.
Pero no me quiero adelantar, primer tema, y ya la inercia me despegaba del suelo, me desprendía de mis lentes, mi pelo y prácticamente mi remera, jajaja, era tan genial que abrieran con el primer tema que conocí de ellos, ya habían logrado que se me forme una sonrisa de oreja a oreja que no se borró hasta mucho después.
"SOOOO" , la primera palabra del primer tema, después de gritarla a más no poder me percaté de que lo que se venía era grande. Y no me equivoqué.
Siguieron, como ya mencióné, Every Day..,Heat Dies Down, You Want History, temas que escuché TANTAS veces acá en mi pc, camino a la escuela, camino a cualquier otro lado y lo estaba cantando a los gritos pelados con quien era la voz original del tema, era tan genial sentir que estaba ahí.
Con papel arrugado en mano, Ricky intentó de una manera bastante tosca como graciosa comunicarse con nosotros, "Volverse Locos!!", "Gracias Gracias Los Quiero! LOS QUIEROOOO", posiblemente Wilson no sabía lo que decía siquiera, pero fue un buen gesto de su parte (y a mi parecer muy tierno también), aunque la mejor manera de comunicarse con nosotros no fue esa, sino su música sin duda.
¿Qué siguió? Nada más ni nada menos que Ruby, uno de sus hits, que tan solo con escuchar los primeros acordes provenientes de la guitarra de Whitey descontroló a un público que ya estaba delirando con su música, sí definitivamente fue así, o por lo menos yo lo sentí así.
Modern Way, un tema que supone ser más tranquilo, bueno, el público no pareció percatarse de ello, porque saltábamos y gritábamos como si fuese uno de los temas más movidos de la banda, creo que todo su show siguió esa línea, era tal la euforia que teníamos que no podíamos darnos un respiro ni en las canciones más tranquilas siquiera.
Le siguió uno nuevo, pero igual de festejado que los otros: Never Miss A Beat, qué buen tema, por dios, uno de los que yo más esperaba, y de los que más canté. El estribillo de esa canción fue un atentado a mi garganta que ya venía siendo atacada desde hacía un rato.
Con Caroline,Yes tuve otro MÍNIMO respiro, Gala emocionada porque no se lo esperaba, yo una kamikase aprovechando los milisegundos en que la gente estába mínimamente más calmada para hacer uso de mi cámara de fotos. Sin embaro no podía resistir la tentación de cantar a coro "IN MY LIFE TURURURURURUU"
Y mi querido Ricky se paró en el escenario, micrófono en mano, y con una voz muy baja nos dijo como si nos estuviese contando un secreto Na Na Na Na Naa, para qué... ya sabíamos a la perfección lo que se nos venía y eso hizo estallar en gritos a todos. Así como recita el título del tema, empezó a cantar Ricky, y Gala al lado mío cantaba "Yola Yola Yolaaa".
Entre idas y venidas Ricky recorría el espacio que era destinado a la prensa y prevención, haciendo que estar tan cerca de la valla fuera un suicidio. Como siempre, cosa que yo no esperaba la verdad, Wilson se trepó a la valla para ser casi devorado por un puñado de fans que si podían no le dejaban ni un hueso sano, y debo reconocerlo, si yo estaba cerca tampoco lo hubiese dejado sano, jajaja.
I Predict a Riot, medio tarde, porque el Riot había empezado cuando apareció la banda, otro tema ganchero, otro de los más conocidos y por ende más festejados de la banda, yo seguía maravillada de estar ahí, y más maravillada estaba de cómo podía estar aguantando tan a la perfección todo, estando a punto de que me exploten los riñones, semi asfixiada y sedienta, con una galletita como único alimento de todo el día. Definitivamente los recitales hacen un efecto extraño en mi, como si se me desprendiera el alma del cuerpo, haciendo que lo que éste último necesita quede en segundo plano.
Half The Truth, otro tema nuevo, no tan conocido como Never Miss... para la gente, pero muy muy recomendable, por más que no figure entre mis favoritos, a esas alturas todo era motivo de descontrol, si Ricky Wilson se ponía a cantar Bombón Asesino hubiese saltado y gritado de la misma manera.
The Angry Mob, uno de los primeros temas que empezó a sonar en mis oídos. Parecía que los Kaiser no se contentaban con vernos enloquecidos con aquel tema, porque lo extendieron consiguiendo que nosotros, desaforado público no tengamos ni un minuto de descanso.
Ricky era un loco de la vida, pero no era esa clase de locura que demostró el cantante extraño de The Mars Volta, estaba más dentro de lo normal, pero sin dejar de ser Ricky, trepándose en los super woofer que había a los lados del escenario, escalando los andamios y cantando trepado al mejor estilo spider-man desde ahí, me encantaba verlo hacer sus locuras.
La anteúltima fue Take My Temperature, única canción que, al no tener en mi reproductor de música no conocía tanto como todas las anteriores.
Thank You, Gracias, We're Kaiser Chiefs, Good Night.... NO! en ese momento me preocupé, NO SE PODÍAN IR sin tocar ESE tema que no habían tocado, no podían hacerme eso, lentamente mi cara se tornó confusa, podrían haber elegido no tocar Spanish Metal, incluso Thank You Very Much, pero no me entraba en el cerebro que hubiesen elegido no tocar mi tema favorito.
Pero los Kaiser no se iban a ir así, y no lo hicieron. Los primeros acordes de Oh My God empezaron a sonar, desatando el último y más fuerte impulso de adrenalina, por lo menos en mi, y creo saber que en Gala también, ya está, ahora puedo morir tranquila, si, eso le dije.
Y de repente me convertí en una atleta, saltando de una manera que nunca había saltado, logrando ver mucho más de lo que pude ver en el recital, y cantando-gritando con el último respiro que me quedaba, pero con todo el power del mundo, lo mejor para el final, la cerecita del postre, y ensima, fue otro de los temas extendidos, en los que no solo lo alargaron ellos, sino que nos alcanzaron al público un micrófono para cantar con ellos lo que quedaba del último tema.
Y finalmente así dieron cierre a su primer show en la Argentina. Se fueron, tan rápido como habían llegado, y definitivamente cuarenta veces más rápido de lo que hubiese querido que fuera, más teniendo en cuenta lo mucho que esperé ese primero de noviembre.
Debería haberme sentido agotada cuando se marcharon los ingleses, pero todavía la energía que tenía en el cuerpo era increible, a tal punto que seguía gritando, saltando y corriendo por ahí.
REM empezó su show, demasiado agotada para avanzar, los ví desde lejos, pero disfrutando un show mucho más calmado para mi, y de una banda que se notaba sabía lo que hacía. El recital brindado por ellos fue impecable, y realmente muy agradable. Sin dudas Losing My Religion fue el tema que más esperé y disfruté de esa banda que si bien no era el motivo de mi presencia en el Club Ciudad, no caben dudas de que merecía ser escuchada.
¿Y ahora? Solo queda esperar a que vuelvan, porque por más que me fui más que satisfecha del show que los Kaiser Chiefs dieron en nuestro país, me quedé con ganas de más (insaciable era ella...), pero más que otra cosa, me dejaron muy muy contenta, y todo gracias a esa hora y cinco minutos de euforia que nunca disminuyó, la cual generaron esos cinco individuos.
¿Qué mas puedo decir? Nick, Whitey, Simon, Peanut (o como me gusta decirle a mi: Bombín) y Ricky...GRACIAS por hacer revivir la Stefi recitalera que ya tenía adormecida dentro mio hacía casi casi un año de la manera espectacular que lo hicieron :)
martes, 4 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario